La Organización Mundial de la Salud define la adolescencia como “la fase de la vida que va de la niñez a la edad adulta, o sea desde los 10 hasta los 19 años” (OMS, s.f) y destaca su importancia a la hora de sentar las bases de una salud y un desarrollo vital sanos.
Por sus características concretas, tanto biológicas como sociales, esta etapa puede llegar a convertirse en un desafío tanto para los y las adolescentes como para su entorno más cercano. Para comprobarlo, no tenemos más que hacer una consulta rápida en internet para comprobar las búsquedas más frecuentes realizadas en un conocido buscador:
En la imagen: una búsqueda de Google en la que se ha escrito “adolescente que” y aparecen completadas opciones como “no quiere estudiar”, “no quiere hacer nada”, “miente mucho”, “se autolesiona”, etc.
En sucesivas entradas del blog, detallaremos algunas de estas características, así como algunas orientaciones para realizar un acompañamiento respetuoso en esta etapa.
Es muy habitual que se etiquete socialmente esta etapa como “problemática”, “intensa”, “difícil” e incluso “conflictiva”. Este ideario común lleno de prejuicios, que nos aborda automáticamente cuando pensamos en la adolescencia puede hacer que, como personas adultas, acompañemos desde la inseguridad, la autoridad impuesta o incluso desde el miedo, generando relaciones tensas, inestables e incluso tóxicas.
Para empezar a dar pasos hacia un acompañamiento respetuoso es necesario cuestionar nuestra propia visión de la adolescencia: ¿qué pensamos de esta etapa? ¿cómo éramos de adolescentes? ¿cómo nos sentíamos con respecto a las figuras de autoridad (padre, madre, familiares de referencia, profesorado, etc.)? ¿es posible que nuestras propias experiencias estén afectando de alguna manera en nuestras interacciones (“no quiero que pase por lo que yo pasé”, “yo era una bala perdida y no quiero que le pase lo mismo”, “a mí me criaron de forma muy estricta y no me fue tan mal…”)?
Esta reflexión personal puede servirnos para situarnos en una posición más cercana y empática ante la experiencia adolescente, frecuentemente olvidada o sustituida por la perspectiva “adulta”.
En la imagen: Un primer plano de una persona con una capucha puesta. La persona pone la mano entre la cámara y su rostro, tapando la boca y la nariz.
Aunque nos “resituemos” e intentemos comprender cómo se sienten, es absolutamente humano que en esta etapa sintamos una intensa necesidad de protegerles e intentar evitar las circunstancias de riesgo que puedan experimentar. Esta necesidad de protección y cuidado pueden conducirnos a plantear normas excesivamente estrictas que limiten sus oportunidades de:
- Aprender a tomar decisiones y desarrollar pensamiento crítico.
- Adquirir habilidades personales y sociales: resolución de conflictos, empatía, confianza en sí mismos/as, responsabilidad, independencia, etc.
- Establecer relaciones sociales significativas.
Aunque pueda resultar complicado, es conveniente realizar el esfuerzo de intentar encontrar un equilibrio, por un lado, ofreciendo la posibilidad de que experimenten situaciones nuevas que les permitan desarrollarse y adquirir nuevos aprendizajes y, por otro, dotándoles de las herramientas y estrategias necesarias para enfrentarse a posibles situaciones de riesgo a las que puedan verse expuestos o expuestas. Algunas de estas estrategias pueden ser:
- Plantear la idea de hablar con alguien de su confianza de las situaciones que les preocupen.
- Consensuar a una persona concreta a la que recurrir ante una situación de riesgo.
- Enseñar a identificar y detectar posibles situaciones de acoso.
- Poner límites ante situaciones que les puedan incomodar.
- Ofrecer la posibilidad de contar con acompañamiento psicológico profesional.
En próximas entradas continuaremos profundizando en diferentes aspectos relacionados con la adolescencia y compartiendo orientaciones que puedan ser útiles en el acompañamiento de esta etapa.
Si estás atravesando un momento complicado acompañando o experimentando este periodo, puedes contactar con nosotros en los teléfonos 988 782 237/ 698 155 820 o en el correo: info@padillaourense.com
Sonia López Rodríguez Nº Colg.G- 6754
-OMS. (s. f.). Salud del adolescente. Recuperado 28 de diciembre de 2022, de https://www.who.int/es/health-topics/adolescent-health#tab=tab_1
-Desarrollo neurológico en la adolescencia: influencia de la dopamina, oxcitocina y la serotonina en la adolescencia: https://www.unicef.org/uruguay/media/5421/file/Ficha%202%20-%20Neurodesarrollo.pdf